
El programa «Celebrar en paz» de Alcalá de Henares ha estado en funcionamiento desde 2003, gracias a la contribución del Consejo Local de Alcalá de Henares a la Asociación «Los amigos del pueblo Saharaui de Alcalá de Henares».
Es un programa de conciencia organizado por las asociaciones de amigos del pueblo Saharaui junto con las delegaciones del Frente Polisario de España y el Ministerio de Juventud y Deportes de la República Árabe Democrática Saharaui (RASD).
La ONU advierte a los refugiados Sahrawi sobre la crisis alimentaria en Argelia.
El concejal de Participación Ciudadana, Andrés Esther, explicó que los beneficiarios son niños y niñas de entre 8 y 12 años, permitiéndoles escapar de las difíciles condiciones en las que viven, alejarse de las altas temperaturas del desierto argelino y recibir exámenes médicos y tratamientos especiales. Para mejorar sus condiciones básicas, se les ofrece una dieta equilibrada y se fomenta el aprendizaje del español.
El proyecto surgió de la necesidad de los niños y niñas saharauis que viven en campos de refugiados saharauis para alejarse de la realidad de las deficiencias nutricionales y climáticas que han experimentado y que continúan experimentando después de más de 50 años.
El Congreso aprueba el procesamiento de la nacionalidad española para los saharauis nacidos antes de 1976.
Con el programa «Vacaciones en paz», un grupo de niños y niñas de los campos de refugiados en Tinduf, Argelia, son temporariamente acogidos por familias que viven en Alcalá durante los meses de verano, julio y agosto.
Las familias interesadas en acoger a estos niños pueden comunicarse con la asociación por correo electrónico (Vacazesenpazalcala@gmail.com) o por WhatsApp al 629275817. Se puede solicitar la acogida hasta abril del próximo año.
21 saharauis que solicitaron asilo en Barajas fueron deportados, incluidos dos niños de un año.
Este programa, en el que también colabora el Departamento de Educación, contribuye a la consolidación de los lazos históricos que unen al pueblo saharaui con los españoles y promueve el conocimiento de diferentes culturas y formas de vida. Ha permitido la creación de lazos familiares duraderos debido al contacto continuo con las familias anfitrionas, según el consejo local.
FUENTE